la sirena Calipso vivía en un arrecife de coral lleno de colores brillantes, entre anémonas y peces exóticos y payaso entre otros. ese mundo submarino se llamaba Coralina.
Un día encontró un libro con tapas de plomo en el fondo del océano, era un libro antiguo con historias de como era el mar, en otras épocas.
El reino donde residía estaba gobernado por sirenas. En este mundo, cada una tenía un trabajo, dependiendo de sus habilidades, algunas cantaban hermosas melodías y otras jardineaban arreglando los arrecifes de colores.
Calipso era un joven sirena, conocida por su habilidad para comunicarse con otros animales marinos, como los delfines, las tortugas, las ballenas o cualquier otro.
Un día vino una tortuga carey, para decirle que el arrecife estaba en peligro, debido a los desechos que los humanos estaban echando al mar.
Calipso, decidió con todas sus fuerzas, unir a algunas sirenas, con el fin de formar un grupo al que bautizaron como "Las Guardianas del mar", juntas iban a transformar los paisajes bajos las aguas, limpiando y restaurando cada rincón afectado.
También organizaron festivales donde todos los habitantes marinos que compartían talentos artísticos pudiesen participar, ayudando a recuperar el fondo marino.
Gracias a su valentía, determinación y cooperación, el arrecife que estaba medio moribundo, resurgió más vivo que nunca.
Así fue como Calipso y sus compañeras demostraron que la magia no solo reside en canciones con voces bonitas, sino también en actos valientes para proteger en mundo donde vivimos.
Cuando tuvieron todo listo, las sirenas viían en armonía con los oceános, como estaban tan contentas, se reunían todas las mañanas para cantar y contar historias en la Gran Cueva de Coral, donde el sol iluminaba el agua creando un espectáculo mágico.
Un día su amiga Naya, descubrió algo nuevo,, era una corriente misteriosa que conducía a un jardín escondido de algas que se movían con el ir y venir de las olas.
Más allá del jardín había unas criaturas fantásticas como los caballitos de mar, peces arcoiris luminosos.
Intrigada con este descubrimiento, Naya convenció a sus amigas y a Calipso para explorarlo juntas, y entre burbujas centelleantes y grandes corales, aprendieron secretos sobre la naturaleza y como cada criatura tiene su papel fundamental en el ecosistema marino.
Cuando acabaron de explorar, volvieron a casa en Coralina, y decidieron celebrar una fiesta de la diversidad marina con música a la luz de la luna cada año.
Lasa sirenas nunca más dejaron de explorar para descubrir nuevos sitios y cuidar de su mundo acuático.
BukarteZ - 2002
